viernes, 28 de noviembre de 2008

Francisco Scutellá

El mate

Otra preferencia del argentino, además de la carne, es su afición al mate. En esta oportunidad hablamos con Francisco Scutellá - director del Museo Único del Mate de la Ciudad de Paraná - quien nos habló sobre el mate, sus orígenes, los tipos que hay, el arte de prepararlo y sebarlo.
El mate se toma de diferentes maneras, de acuerdo a las tradiciones y gustos en las diferentes regiones del país. Se le puede agregar a la yerba, azúcar negro, cascarillas de naranja o hierbas que varían de región en región. Por ejemplo: manzanilla, café, menta, etc.
Tomar mate es más que beber un líquido a través de una bombilla... es una sensación... un sentimiento... una tradición... una compañía...

Scutellá además de ser el creador de los mates que Argentinísima entregó durante una década (todos los domingos en Canal 7 y América); continuador del «Mate de la Amistad» creado por Don Fernando Ochoa; es el fundador del único museo monotemático del mate del país y del mundo. Autor de 5 libros de narrativa costumbrista, entre ellos «El Mate, Bebida Nacional Argentina», que va por la quinta reedición.
Productor del monumento al mate más alto del país entre los 25 existentes. Hacedor del mate del Concilio Ecuménico. Es el heredero y sostenedor de los Reglamentos para concursos de Cebadores y Tomadores de mates en todo América. También es el único artesano que talla los mates tradicionalmente por fuera y atípicamente por dentro. Fue el único tradicionalista contratado para el Encuentro Internacional de la Lengua, con la presencia del Rey de España, y 2000 representantes y periodistas de todo el mundo.



lunes, 20 de octubre de 2008

«Îsîrî Pau Ha Ka’agüî»

Comunidad Guaraní...

En la ciudad de Paraná se encuentra la Comunidad Guaraní «Îsîrî Pau Ha Ka’agüî» cuyo nombre significa Entre Ríos y Montes. En esta oportunidad hablamos con Jesús Romero miembro de dicha comunidad.

Ñandejára (nombre de Jesús en guaraní) nos acercó a sus costumbres y vivencias. Hizo referencia a su pueblo, al idioma guaraní, en especial sobre la conservación del mismo. Es importante detacar que el idioma guaraní ha sido declarado: «idioma del MERCOSUR junto al portugués y al castellano»
Kuarahy Vera (Sol Rojo), vive en Moreno, provincia de Buenos Aires, y fue selecto por la comunidad como Jefe Indio de la misma. Este hombre llegó del Paraguay hace muchos años y nos explicó que es difícil predecir la fecha exacta de su llegada a nuestro país porque para ellos – los guaraníes – todo es una misma tierra sin división de barreras o fronteras.



La Comunidad Guaraní «Îsîrî Pau Ha Ka’agüî» está a punto de adquirir la personería jurídica. Una de las actividades que lleva adelante es enseñarles a sus miembros la realización de distintos trabajos artesanales ejerciéndolos no sólo como un oficio sino también como una manera de mantener la tradición.


lunes, 29 de septiembre de 2008

Centenario del Teatro 3 de Febrero

Un poco de historia...


El 9 de diciembre de 1851 se inician las obras de construcción del Teatro, dispuestas por el General Don Justo José de Urquiza. La inauguración de la sala tuvo lugar el domingo 8 de agosto de 1852, el gobernador delegado era poe entonces Antonio Crespo, quien en su discurso señala el reconocimiento a la batalla de Caseros para su denominación.
De esta manera, la ciudad comienza a convivir con la institución que constituirá el centro de la vida cultural y social de la ciudad. Con el tiempo, la actividad de la sala se intensifica cuando Paraná es nombrada Capital de la Confederación Argentina. Por lo tanto, toda actividad de significación artística que llegaba al país era recibida en el "3 de Febrero". Esto sucedió hasta que en 1861 Paraná pierde su condición de Capital de la Confederación, producto del enfrentamiento entre Mitre y Urquiza, y es Buenos Aires ahora el centro de la gran actividad artística.
El 23 de marzo de 1873 se crea la Municipalidad y el 31 de diciembre de 1874, el Teatro 3 de Febrero pasa a depender del Municipio y comienza a ser administrado por una Comisión particular que facilitó las mejoras de la sala y cuidó su programación.
El edificio original duro hasta 1890 debido a que la revolución producida determinó que fuera usado para acantonamiento de las tropas.
De esta manera pasaron casi veinte años antes de que fuera inaugurado el segundo edificio en el mismo lugar. Fue el 18 de octubre de 1908 cuando renace el nuevo Teatro 3 de Febrero, bajo la dirección del arquitecto Lorenzo Siegerist, tal como hoy lo conocemos.
Sin embargo, el viejo edificio es mucho más que sus dimensiones, las líneas arquitectónicas, sus paredes, las pinturas y las decisiones políticas que abrieron o cerraron sus puertas. Es un sin fin de momentos de alegrías y tristezas, de vacaciones, de sacrificios, de talento, de obras sublimes y de encuentros populares. El viejo edificio sabe, recuerda y guarda. Solo hay que saber escuchar en el silencio o mirar detrás de las bambalinas, a las almas que tantas veces espiaron por allí, nerviosas y expectante ante cada ceremonia, antes de que las luces se enciendan y el telón se abra.


Noche de gala...


El Teatro 3 de Febrero está celebrando su primer siglo de vida con una distinguida ceremonia prevista para la noche del 19 de octubre.
Se contará con la presencia de la Orquesta Sinfónica Nacional y prestigiosas personalidades de Paraná, reconocidos internacionalmente: el maestro Pedro Ignacio Calderón, el concertista Eduardo Isaac y el compositor Oscar Edelstein. La entrada es libre y gratuita.
En el marco del Centenario, desde comienzo del año, el Teatro viene realizando diferentes actividades y espectáculos, integrando una nutrida agenda de festejos, los cuales se extenderán durante los meses venideros.


Presentes con futuro...

«PERIODISTA»

Ser periodista es una de las actividades más soñadas por los jóvenes. En este libro Margarita Revière, con toda su experiencia acumulada durante tantos años en el ejercicio del periodismo, se convierte en una guía para aquellos que quieran elegir esta profesión y desempeñarse en ella.
El libro se divide en siete capítulos. El primero de ellos, «Qué es ser periodista», plantea que vivimos en un mundo donde el periodista actúa como “espejo”. Es decir, que no tiene privilegios al haber elegido esta profesión sino que refleja y participa en la formación de la comunidad. Por eso expresa que ser periodista es la “broma más bella del mundo”. Sin embargo, así como es posible encontrar buenos profesionales también es probable encontrar un “mal periodista”. Éste es aquel que abusa no sólo de su poder como intermediario de los diferentes grupos sociales, sino también ante el trabajo que requiere dedicarse a esta profesión.
El periodista es el traductor de la realidad, pero explicar que sucede en esa realidad no es tarea sencilla, requiere de aprender a mirar, comprender, relacionar y, por sobre todo, tener la seguridad de que es imposible comprender todo. En ello se centra el primer capítulo del libro «Profesiones con futuro: Periodista». Margarita Revière explica las cuatro pruebas fundamentales que un periodista debe pasar para desempeñarse como tal.
Mediante la curiosidad se podrá entender por qué pasa lo que pasa. De allí que un periodista comenzará a hacerse preguntas que, sin dudas, requiere del conocimiento del tema sobre el que se va a indagar. En este sentido la autora explica que al exigir una respuesta pueden suceder dos cosas: que el interlocutor no conteste o bien se responda toda. Finalmente, la docilidad es la cuarta prueba que debe superar un periodista. Este punto indica, principalmente, que esta no es profesión para aquellos que buscan seguridad.
Con este libro cada periodista o cada comunicador social encontrara respuestas a preguntas como: ¿Qué trabajo se requiere para llegar a ser un buen periodista? ¿Cómo es el mercado de trabajo en esta profesión? ¿Qué aspectos se deben tener en cuenta a la hora de hacer una entrevista? Entre otras.



MARGARITA RIVIÈRE

Nació en Barcelona en 1944. Es periodista independiente de amplia trayectoria. Autora de varios libros y colaboradora del diario El País y del diario El Correo de Bilbao (España).
Se ha desempeñado en todos los géneros, desde el análisis y la interpretación de la cultura hasta llegar a ser autora de libros que hablan del fenómeno de la moda. Durante cuatro años fue directora de la Agencia EFE en Cataluña (España) y también estuvo a cargo una columna diaria en El Periódico, durante diez años.
Margarita Rivière ha trabajado en televisión y colabora habitualmente en el programa de Josep Cuní en Ona Catalana de Barcelona. Además, se desempeñó en La Vanguardia haciendo más de 300 entrevistas, que ganaron el Premio Ciudad de Barcelona y su ensayo “Lo cursi y el poder de la moda” obtuvo el Premio Espada de Ensayo. “La década de la decencia”, “Crónicas virtuales”, “Profesiones con futuro: Periodistas” y “El segundo poder” son algunos de sus principales libros que refieren a la comunicación de masas.

domingo, 28 de septiembre de 2008

Sobre-explotación del sábalo

La no gubernamental Fundación Proteger reveló en el año 2006 partes de un informe casi secreto de la Subsecretaría de Pesca de Argentina que admite que el sábalo está en riesgo de colapso por sobreexplotación.
La organización Proteger, que desde hace años denuncia la sobrepesca de esta especie, coincidió con el diagnóstico pero criticó la falta de difusión del estudio oficial.
El informe “confirma lo que venimos sosteniendo, pero se trata de una foto, y para dar cuenta del problema hay que hacer estudios comparativos”, dijo Julieta Peteán, de la fundación. Según Proteger, en Argentina se extraen unas 70 mil toneladas anuales de sábalo —primera especie entre las exportaciones de río—, la mitad de lo que se capturaba hace 20 años con un esfuerzo de pesca menor.


El año pasado se realizó un estudio sobre la sobreexplotación del sábalo. El mismo fue coordinado por Pesca de la Nación y realizado por el INIDEP, el INALI y las provincias de Santa Fe y Entre Ríos, gracias a la intervención del Defensor del Pueblo de la Nación, constituyendo un éxito de los mecanismos democráticos en el país y un precedente alentador.
El estudio, cuyos editores son Alberto Espinach Ros del INIDEP y Ramiro Sánchez de la Subsecretaría de Pesca de la Nación, lleva por título “Proyecto Evaluación del Recurso Sábalo en el Paraná – Informe final de los resultados de la primera etapa 2005-2006 y medidas de manejo recomendadas”, fue entregado a PROTEGER en un documento de 58 páginas que contiene una descripción general de la pesquería, de la especie sábalo, análisis de datos, gráficos, tablas, conclusiones generales y algunas recomendaciones.
Unas de las mejores formas de proteger esta especie es que se frenen las exportaciones. Para el subsecretario de Recursos Naturales y Pesca de Santa Fe, Alejandro Larriera, es un dato “importante y positivo” que se haya asignado (en el 2007) un cupo de exportación de sábalos regional de 8.000 toneladas (t), desde el gobierno nacional a las provincias de Entre Ríos y Santa Fe.

Este año una de las ciudades de la provincia vecina, la municipalidad de Reconquista y PROTEGER firmaron un convenio de colaboración para trabajar en conservación y uso sustentable de los humedales y la pesca en la región. El municipio otorgó en comodato un predio en el Puerto Reconquista donde funcionará el centro de procesamiento de pescado de río.





viernes, 26 de septiembre de 2008

Educación Bilingüe Intercultural

La comunidad Mocoví pertenece al grupo Guaycurú, junto con los Toba y Pilagá. Son aproximadamente 1.500 personas que habitan en nuestro país. Recuperando su identidad como pueblo aborigen, esta comunidad trabaja arduamente. Habitan en la provincia de Santa Fe y el sur del Chaco. No son dueños de las tierras en las que residen. La pérdida de la tierra, trajo aparejado la destrucción de su antigua organización. Muchos viven dispersos y otros conforman comunidades con identidad propia en la periferia de las ciudades o zonas rurales.

Actualmente se han organizado para recuperar su bagaje cultural y sus tierras. Trabajan junto a otras etnias de peones rurales, hacheros, cosecheros, empleados en aserraderos ó municipios. Los que tienen tierra, realizan minicultivos de algodón, hortalizas, maíz, etc. Algunos hacen artesanías que venden ó cambian por ropa usada. Carecen de protección laboral y social. A pesar de la aculturación se identifican como Mocovíes con sus formas de ser, pensar y hacer. Muchos conservan lenguas internas.

EDUCACIÓN BILINGÜE
El proyecto de educación bilingüe aborda la problemática de rescate y proyección de la lengua mocoví. Plantea además la formación de maestros “idóneos” que vuelvan a su comunidad para trasmitir la lengua originaria.
Las comunidades aborígenes de nuestro país han sufrido a lo largo de la historia el despojo no sólo de sus tierras, sino también de su cultura e identidad. Avasalladas por el español, las lenguas originarias de este continente fueron perdiendo fuerza y en muchos casos corren serios riesgos de desaparecer. Por su parte, la escuela tradicional se encargó de que los aborígenes negaran su propia identidad, ocultando su lengua, lo que provocó el empobrecimiento de la misma.
En la provincia de Santa Fe, en la ciudad de Recreo, se asienta una comunidad de aborígenes mocovíes. Varias generaciones de esta comunidad abandonaron su lengua para hablar sólo el castellano. Los jóvenes, los niños y algunos adultos no se sienten integrantes del pueblo mocoví, simplemente porque no hablan ni comprenden su lengua.


Banco de Germoplasma

Nuestra provincia cuenta con un proyecto de Investigación y desarrollo tecnológico, el cual se lleva adelante en forma conjunta entre estas instituciones y la Escuela Agrotécnica Las Delicias.

Mediante este proyecto la Escuela cuenta con un «Banco de Germoplasma», una colección de material vegetal vivo en forma de semillas y esporas cuyo objetivo principal es localizar, recolectar y conservar plantas consideradas de interés investigando su adaptación, rendimiento en aceites esenciales y resistencia al clima entre otros aspectos, como así también desarrollar equipos que se adapten a este tipo de emprendimientos para facilitar el trabajo del productor y hacer más eficiente su tarea.
El Banco cuenta con una gran variedad de especies y tipologías entre las que se encuentran menta, oregano, coriandro (para chacinados), perejil, stevia, aloe vera, malva, mostaza balnca y negra, trigonela (utilizado para el curry), albhaca, melisa, tomilllo y romero entre otras.
Si bien, las especies con las que trabajan la Ingeniera Graciela Farias y el Ingeniero Otto Brutti no se comercializan...Existen formas de comercialización de los mismos.
El producto de estas actividades agrícolas “alternativas”, como se las conoce popularmente, puede ser comercializado de diferentes formas, como producto seco luego de ser sometido a procesos de secado, como aceites escenciales y como oleo resina, que requieren trabajos de destilación.
En cuanto a los productos secos, los mismos son utilizados generalmente para condimentos como el caso del orégano o el perejil, las aceites escenciales se utilizan para la producción de aliementos y cosméticos. Un ejemplo de los usos que se otorgan a estas plantas es el hinojo y la menta, cuyo aceite escencial es utilizado para la elaboración de pastas dentífricas.

sábado, 16 de agosto de 2008

Ayer sí, hoy no...

Paraná, 22 de mayo de 2008



«Ausencias», la muestra fotográfica del fotógrafo entrerriano Gustavo Germano, se encuentra en la ciudad de Paraná. La misma expresa el drama de los desaparecidos en el último gobierno militar.


“Comunicado Nº 19, 24 de marzo de 1976: ‘Se comunica a la población que la Junta de Comandantes Generales ha resuelto que sea reprimido con la pena de reclusión por tiempo indeterminado el que por cualquier medio difundiere, divulgare o propagare comunicados o imágenes provenientes o atribuidas a asociaciones ilícitas o personas o grupos notoriamente dedicados a actividades subversivas o al terrorismo. (…)’ Diario La Prensa” .


Este decreto se respetó durante la última dictadura militar que vivió nuestro país. La censura proclamada por dicho gobierno ya no existe. Fue la página más negra de la historia argentina escrita a base de sangre, tortura, violaciones físicas y de derechos, donde la ley no existió o se manipuló para justificar el terror. Germano, a través de su muestra, invocó la memoria de los desaparecidos, víctimas de la represión ilegal. Él es testigo directo de la ausencia que provocó el gobierno de 1976 arrancándole su hermano mayor, Eduardo Germano.
«Ausencias» está conformada por diferentes casos entrerrianos, cada uno registrado por dos fotografías. Cada par cuenta una historia particular involucrando a grandes, adolescentes y niños, mostrando el rostro de los que ya no están. En una de ellas aparecen posando un/os de los desaparecidos junto a familiar/es y/o amigo/s en un determinado lugar. En la otra, sólo está la representación de la ausencia siendo manifestada con la presencia del familiar o amigo en el mismo lugar. Esta muestra esta compuesta por 15 pares de fotos. La primera de cada historia es del pasado, no tan lejano, extraída de álbumes familiares, y las segundas son más actuales. Fueron tomadas en el año 2006, al cumplirse 30 años del último Golpe de Estado.
Gustavo Germano contó con la colaboración del Registro Único de la Verdad de la provincia de Entre Ríos, la agrupación HIJOS Regional Paraná y la Asociación de Familiares y Amigos de Detenidos - Desaparecidos de Entre Ríos (Afader). La exposición fue producida por la Fundación Casa América Catalunya, instituto que garantizó la viabilidad del proyecto.
Recorriendo el museo y deteniéndose en cada par de fotografías van surgiendo diversas sensaciones, movilizando, conmoviendo, desgarrando el corazón. De fondo se escucha el sonido que proviene de un televisor donde se visualiza la producción de la muestra. La música va recorriendo cada habitación del museo, inundando el lugar con sentimiento de nostalgia, bronca, impotencia, erizando la piel de cada uno que la recorre.


Una de las fotografías más impactantes, que provoca mucha melancolía, es la de “La Tortuga Alegre”, Río Uruguay. Orlando René Méndez y Leticia Margarita Olivera están sentados en la playa. Ella sobre una manta y él en una pequeña reposera. El sol de frente les molesta en los ojos, detrás el río. El viento los despeina. Ellos posando con naturalidad un día de verano de 1975, mientras disfrutaban de sus vacaciones como novios. 31 años después esa playa esta vacía. La inmensidad del río, su tranquilidad y las huellas en la arena denotan la ausencia presente de estos jóvenes.
Esta es una de las fotografías que va contando una historia que no se ve en los libros. Una historia marcada por la sangre de 30.000 desaparecidos, revelando que ese número es de carne y hueso.
Hoy... es el recuerdo de una larga pesadilla en la memoria de nuestros padres que no olvidan, y las fotografías... una muestra del desgarramiento vivido.
La exposición se encuentra en el Museo Provincial de Bellas Artes “Pedro E. Martínez”, de nuestra ciudad. Fue inaugurada el 15 de mayo y estará hasta el 3 de junio, continuando su recorrido por Chile.

domingo, 15 de junio de 2008

Producción de Chinchilla

El vocal de la Asociación Argentina de Criadores de Chinchillas y Director de la rama de Entre Ríos, Rubén Guirado nos comenta acerca de la cría de Chinchillas.
Guirado ya lleva casi 10 años en la producción de estos animalitos. Sus logros son, hoy, evidentes y el fiel reflejo de su esfuerzo. Luego de haber cursado en la Primera Escuela Argentina de Criadores de Chinchillas, alcanzando el título de Perito en Chinchillas, ha participado, expuesto y ganado premios Noveles en la Sociedad Rural Argentina de Palermo 2000. No sólo ganó premios noveles sino que inclusive le ganó, en varias ocasiones, a muchas viejas cabañas que venden reproductores.



Algunos datos a tener en cuenta:
*
Los productores, o la producción más importante de chinchilla – a nivel nacional – es la de la provincia de Entre Ríos.
* La piel de chinchilla también varia de acuerdo a los lugares en que se crian. Las del sur del país son las mejores por el simple echo de las condiciones favorables con respecto al clima, es decir un clima frío.
* Un animalito de estos, se sacrifica de una manera especial para su peloteo, de manera tal que la sangre no afecte a la piel. Se toma de un lado por la cola y del otro por la cabeza y se tiran ambas partes como queriendo separarlas. Luego con un bisturí se hace un pequeño cortecito en la boca donde se introduce otro elemento "en forma de paraguas" que hace un recorrido de la boca hasta la cola (por la parte de abajo) y así de sencillo la piel sale entera y no se ve una gota de sangre.
* La chinchilla es un roedor del Norte de Argentina, Chile, Sur de Bolivia y Perú. Esa zona ha sido su habitat natural hasta fines del siglo pasado en que la caza indiscriminada del hombre terminó con la especie salvaje.
* La piel de chinchilla es la más cotizada en el mundo por el mercado peletero. Es la más liviana, sedosa, tupida y suave. En nuestro país, la Industria aparece hacia principios de la década del 60 y desde aquella época ha tenido un notable crecimiento.
* En el año 2004 Argentina ha pasado a ser un lider mundial en este Industria de exportación. Si bien el crecimiento ha sido importante desde sus inicios, se puede decir que en los últimos 10 años (1998-2008) la situación coyuntural mundial ha dispuesto circunstancias tan favorables para la expansión de esta industria que la tornaron mucho más atractiva aún.
* Ya para 1996 todas las casas de moda de más alto prestigio en la peletería terminaban sus desfiles con prendas de chinchilla. Durante el período 1994-1996 EE.UU. encabeza la producción mundial seguida por Canadá, Alemania y Argentina. En cuanto a Calidad, EE.UU era líder indiscutido seguido por Canadá, Argentina y Alemania.
* Todos los meses sale una revista para los criadores de chinchillas, donde Ruben Guirado también realiza sus aportes con respecto al tema.


MIS ANCESTROS, YO Y.... de peluquero a escritor

“Entrelazo este relato
comenzado en lejanía,
destacando lo que había
y más luego al propiciar,
su figura vio agrandar
cuando al verso respondía”

Cuando el sol dominguero empezaba a despuntar, comenzó a caminar en dirección a la casa de Rafael Ángel Milano.
Uno… dos… tres… y se sentía el crujir de las hojas secas de los árboles otoñales. Cuatro… cinco… seis… y a lo lejos las campanas de la iglesia anuncian la misa de las 8. Siete… ocho… y un auto se estaciona sobre la acera de enfrente. Nueve… diez… once… y el viento que quiere llevarlo a otra dirección. Doce… trece… catorce… sigue su lento caminar. Diecinueve… ¡Veinte! Tan solo veinte pasos los separaba.
Se paró frente a su puerta y, la sensación de tranquilidad, daba la impresión de que allí iba a descubrir algo más que la simple historia del peluquero del barrio. Con su mano fría tocó el timbre y la puerta al abrirse, lo llevó a sumergirse en ese lugar lleno de vivencias.
Rafael Ángel Milano es casado, tiene una hija y tres nietas. Es uno de los primeros que llegó a la zona. Los vecinos lo conocen como Pucho, el peluquero del barrio. El anhelo de conocer su historia y aprender un poco más del lugar permitió compartir una charla. Cincuenta años han pasado desde su llegada al barrio.

— ¿Cómo era el barrio cuando Usted llegó y cómo ve lo ve ahora?
— Acá — señala su casa — compré en el año 58. Después vinieron doña María, Garay, Almeida. Enfrente estaba Herne y mi hermano. Para allá abajo — indica con su mano — era todo baldío y donde está el boliche había una laguna. Desde Avenida Zanni hasta División de los Andes más o menos y, por ésta vereda, había solamente cuatro casas sobre la línea de Provincias Unidas. Estaban las cuatro ahí, pegadas. Después era todo baldío y tierra, hasta casi Santos Domínguez. Pero ésta es la primera casa que se hizo, por eso está media atravesadita.

Resultaba difícil imaginarse aquella época. Comprender la nostalgia del paso de la desolación a la población.

— El barrio ahora es totalmente distinto. Yo escribí una vez, una poesía: “Calle Provincias Unidas: pasado, presente y futuro" y la mandé a El Diario. Ahí me la modificaron pero quedó más linda. Lo que yo quería hacer era una queja por los camiones. Había puesto cómo éstos sabían burlar la vigilancia de los inspectores para pasar y que la iban a romper — dice pensativo —.
La calle Provincias Unidas era de tierra. Por aquí pasaban los animales que los llevaban arriando. Era más tranquila. Nosotros nos dormíamos con el arroro que nos cantaban las ranas y eso se fue transformando hasta convertirse en el explosivo ruido de motos — se ríe irónicamente —.

— ¿Dónde vivía antes? ¿Cómo era su familia cuando era chico?
— Yo soy el noveno de once hermanos. Nosotros vivíamos en el campo, ahí en San Benito. Lo que siempre digo es que no sé como nos criaron, no cierto. Con diez hectáreas de campo y nada más. Papá estuvo enfermo una vuelta y no sé cómo hizo mamá para darnos de comer.
Se comía todo producción propia, de la siembra. Éramos pobres, como la mayoría de la familia.

— Entonces ¿cómo ve la situación del campo hoy?
— Hay que entrar mucho en política y que se yo — mueve los hombros —. A mi me parece que son medidas demasiadas apresuradas del gobierno y que fueron desacertadas en el momento de tomarlas. Va a traer muchos problemas. Ya en este momento están rechazando pedidos de herramientas, que eso debió haberlo hecho a largo plazo.
El gobierno debe ir adecuando todo a la circunstancia, no puede establecer por decreto los precios, porque ellos dependen de la lógica de la oferta y la demanda. El gobierno debería controlar por qué suben las cosas. Claro, cuando empieza a subir uno, después se enganchan todos. A mi cuántas veces me decían: ¿y por qué subió el corte de pelo? Y el corte de pelo en sí, no afecta en nada. Pero tengo que aumentar por la comida que me aumentaron.

De estatura media, ojos claros, su característico cabello blanco y su mirada tranquila revelaban aquellos recuerdos de su peluquería.

— ¿Y cómo llegó a ser peluquero?
— Yo terminé, en el año 50, la primaria completa. Porque antes no era hasta séptimo era hasta sexto, por el hecho de que estaba primero inferior y primero superior. Igual eran siete años.
Con solo correr y ver pastar el ganado no me conformaba. En el año 51 quise entrar en el Ministerio de Obras Públicas, pero fracasé. Salí mal en los exámenes — indicó con un leve movimiento de su cabeza —, por el hecho que siempre tuve un problemita de oído, no oigo bien. Y, en los costados del Ministerio, había una grúa que corría alrededor de la escuela haciendo mucho ruido. Y aquella vuelta, no es como ahora que los chicos no tienen ningún problema en preguntar o meterse, antes teníamos miedo. Generalmente, cuando queríamos hacer una pregunta nos paraban con una cachetada. Tal es así que yo, en esto que estoy escribiendo — dice enseñando su libro — no tengo nada de conocimiento porque nuestros padres nunca hablaron y muchas veces, cuando preguntábamos, nos daban coscorrones. Y bueno, de esa manera yo no me animé a preguntar que me repitieran y salí mal.
En principio del 52 pude haber ido otra vez, pero un cuñado mío, que vivía acá, me dijo si quería aprender a cortar el cabello. Y nunca estuvo en mí pensar el asunto de peluquería, pero con tal de venirme del campo le dije que sí — asienta con la cabeza —.
Y en el 2002, a los 50 años de trabajo, me jubilé.

— ¿Qué puede decir de la peluquería?
— Bueno cuando empecé, me empezó a gustar. Y bueh… por eso seguí, porque el trabajo te tiene que gustar. Y ahí pasó de todo. Tuve buenas y malas — dice melancólicamente —.

— ¿Fue difícil hacer de la peluquería, su profesión?
— Los principios siempre son difíciles. La falta de experiencia y confianza entre la gente y la carencia de locales, hicieron inestable mi permanencia en el barrio y también en el oficio. Eso me obligó a buscar, nuevamente, apoyo en el servicio militar. Pero — y realizando un leve movimiento de sus hombros — nuevos fracasos fueron suficientes motivos de que mi futuro ya tenía un nombre: ser peluquero. Además, no sólo era cortar el cabello sino aprender también a entretener al cliente.

— ¿Cómo fueron esos 50 años dedicados a la peluquería?
— Una larga dedicación al trabajo. Me siento realizado. En el discurso que hice, cuando cumplí los 50 años de peluquero comencé contando un chiste cortito y, obviamente, de peluquero. Una vez un señor entró a una peluquería para hacerse cortar el cabello y después de prepararlo el peluquero le hace la pregunta de rigor, ¿cómo quiere que le corte? Y el señor mirándolo le responde: córteme en silencio.
Me tomé ese atrevimiento porque 50 años con la tijera en la mano es mucho tiempo para que yo guarde silencio, y no pueda contar todo desde el principio y sobre todo como siento mi vida de peluquero. Quería expresarla con sinceridad y humildad.
Encontré una profesión que jamás había imaginado. Y después con los años la amé e hice de ella un cómodo pasar.
Nunca esperé que todo me saliera bien por sí solo, trataba de hacer lo mejor, aunque no siempre lo lograra.

Las agujas del reloj seguían su recorrido y hasta el momento sólo habíamos escuchado la historia de Pucho, el peluquero. Sin embargo, había una pieza que faltaba, una parte de su vida que no muchos conocen y que tratábamos de descubrir.

— ¿De qué se trata el libro que está escribiendo?
— En el libro estoy escribiendo la historia de la familia, desde que vinieron mis abuelos. A mi abuelo casi no lo conocí. Lo habré visto en el año 46 y él murió en el 50. Vivía con una hija y cuando yo iba no había ninguna conversación. Él estaba sentado en un sillón y yo le decía: abuelo ¿cómo le va? y él me preguntaba: ¿Quién sos vos? porque nunca nos conocía.
Pero a este libro, lo estoy escribiendo en una forma muy particular. Está con el patrón del Martín Fierro, del verso y la rima.

— ¿Y cómo que se le ocurrió escribir así, en forma de verso?
— Porque el libro mío de cabecera era el Martín Fierro. Y me gusta la rima. Por otra parte, yo llegué a la conclusión de que si el Martín Fierro hubiese estado escrito en prosa hubiese resultado ser lo mismo que el Juan Moreyra.
No es tanto lo que dice sino en cómo se dice, no cierto. Además, si hubiese escrito por lo que sé, no hubiese escrito nada de la historia. Lo único que sé es que el abuelo vino de Piamonte. Que allá lo citaron para el servicio militar pero, como estaban en guerra, tomó un barco y se vino. No sabemos si, en Buenos Aires, bajó en el puerto o se tiró al agua para que no lo manden de vuelta — refiere riéndose —. No se cómo vino a Entre Ríos ni cómo llegó al distrito Tala.
En una estancia fue donde conoció a mi abuela. Eso es todo lo que yo sé de ellos. Lo demás que está acá — señala su cabeza — es todo imaginación.
Y bueh… el libro empieza:

“Entrelazo este relato
comenzado en lejanía,
destacando lo que había
y más luego al propiciar,
su figura vio agrandar
cuando al verso respondía”.
Y todo está escrito de esa manera.


— ¿Cuántas páginas lleva escritas?
— 205 páginas. Yo empecé con la historia desde 1881. Mi papá nació en enero de 1891. Así que supongo que se habrán casado en el 90, no cierto, porque antes cuando se casaban, enseguida estaba el hijo. Pero también introdujo, cuando él se va a casar, a la familia de la señora.
Ellos vinieron en el año 1857 y compraron donde hoy se puede ubicar calle Racedo, Avenida de las Américas y el Ferrocarril. Cuando en 1881 le confiscaron parte de la casa, compraron más acá — refiriéndose al barrio —.
Bueno desde el año 1857 hasta el 1899, que son 42 años, tengo escritas 205 páginas. Si no será todo imaginación lo que yo estoy haciendo — dice sonriendo —.

— ¿Va dividiendo los capítulos del libro por años?
— No. Por ejemplo, éste capítulo tiene 50 páginas. Acá estoy contando cuando nació el sexto hijo y donde muere la suegra.

— Usted dijo que su libro de cabecera era el Martín Fierro, pero ¿de dónde más se nutre para seguir escribiendo?
— Yo voy pellizcando un poco de todo y voy formando el verso. Por otra parte, si alguien puede una vez leer esto, lo va a leer por el verso, no por la historia. ¿A quién le puede interesar qué hizo o de dónde vinieron mis abuelos? A alguien cercano o de la familia bueno, pero ¿a alguien de allá — expresa con el movimiento de sus manos — que ni sabe quienes somos nosotros?
Historias de inmigrantes está lleno, son todas iguales. Más allá que uno vino de Italia, otro de Francia, uno se casó con una morocha, el otro con una rubia, a uno le fue mejor, a otro peor. Si todos se vinieron disparando de la guerra, es todo lo mismo.
Entonces yo quise hacer algo distinto.
Recuerdo que una vez un profesor me dio un cuento que se llama “El sabio y el rey”. Dice que un rey soñó que se le habían caído todos los dientes y quiso saber que significaba ese sueño. Un sabio le dijo que, por cada diente que había soñado que se le había caído, era un familiar que iba a morir. Y el rey se enoja y le manda a recibir cien azotes de castigo. Llamó a otro sabio y éste le dijo que eso significaba que él sobrevivirá a todos sus parientes. Entonces el rey dice: eso es una buena noticia, y por tal recibirá 100 coronas de premio. Y un guardia le pregunta al sabio ¿cómo puede ser, si usted le dijo lo mismo que el otro?
Ahí está lo que digo: las cosas son como son, pero también son como se digan.

— El libro se llama "Mis Ancestros, yo y…
— Y y y y … — responde riendo —

— Algún recuerdo que tenga presente…
— Siempre agradezco a todos: a Dios obviamente, a la sociedad que siempre me respaldó. Uno nunca es suficientemente fuerte como para hacer todas las cosas solo. Siempre necesitamos de la ayuda moral, económica, entre otras cosas, de otro.
Siempre quise hacer algo porque, a pesar de que estaba conforme con todo, sentía que había un vacío — dice pensativo —, me faltaba algo y no podía saber que era.
Y una vez vino una chica a hacerme unas preguntas y después cuando me trajo el trabajo me preguntó si yo seguía escribiendo. No, le digo. Y me pregunta: ¿Y por qué? ¿Por qué no escribe?
Cuando vos queres hacer algo, si te gusta, lo hacés. No consultás si tenes fuerza de voluntad. A vos te gusta y lo hacés. Pero cuando no queres hacer nada, enseguida buscas los pretextos para no poder. Eso ocurre, por ejemplo, con el cigarrillo y todas esas cosas que dicen no puedo. ¡Qué no va a poder! — exclama — ¡No quiere!
Entonces empecé a buscar los pretextos. Que no tengo tiempo, que se yo. Y en ese momento la chica me dijo: pero escriba algo, no es necesario que lo haga todos los días. Y cuando no tenga ganas de escribir, agarra un papelito y pone hoy no tengo ganas de escribir. Eso es suficiente motivo para arrancar.
Yo hago aerobismo, salgo al Parque Gazzano a correr. Pero si me pongo a pensar si lo hago o no, pero muchísimas veces no lo voy a hacer — afirma —, porque no tengo ganas de hacerlo. Sin embargo, cuando uno empieza, se entusiasma y sigue.

La peluquería fue siempre ese lugar de encuentro entre amigos, donde el sillón era ese confesionario de orgullosas hazañas y conquistas personales logradas por cada uno. Es cierto que han pasado muchos años, pero todo ese tiempo no fue capaz de hacerle olvidar el encanto del sonido de la tijera. Quedarán en su memoria los silenciosos sillones, el espejo, que con su brillo majestuoso y su fidelidad refleja nuestra imagen y nos devuelve la sonrisa, o la mueca del cansancio por tantas horas parado frente a él. Aquella verde y vieja banqueta en la que se sentaba en los momentos en que tenía dificultad para trabajar de parado; y aquel burrito de plástico, con que entretenía a los más chiquitos para que se dejaran cortar. Así se termina ese viaje imaginario hacia los recuerdos del barrio y de la peluquería. Pero una nueva aventura empieza, con nuevas ideas que invaden su mente y que buscan ser plasmadas en esas hojas en blanco. Con su pluma en mano y la emoción de recordar sus antepasados, un nuevo camino se abre para este peluquero del barrio: el camino del escritor.

lunes, 26 de mayo de 2008

Producción de Stevia

La Stevia (Rebaudiana Bertoni) es una yerba dulce natural alternativo al azúcar y a los endulzantes artificiales obtenido a partir de un arbusto originario de Paraguay y Brasil. Ha sido usado por los indios guaranís y en países como Japón.
Las hojas de la planta son 30 veces más dulces que el azúcar y, el estracto, unas 200 veces más.

El presidente del Organismo para la Producción y el empleo de la Municipalidad de Paraná, Ing. Julio Lujan ha realizado distintas reuniones con productores para que se incorpore el cultivo de la Stevia, en la provincia de Entre Ríos. Con respecto a la producción de esta planta, en la ciudad de Paraná, hablamos con el Ingeniero Otto Brutti (escuchar audio)